El examen de Historia de España en la nueva prueba de acceso a la universidad EBAU ha sido una auténtica sorpresa partiendo de la información que se dio a lo largo del curso.
El examen de Historia de España que se realizó el pasado martes 13 de junio en Castilla y León, en las provincias dependientes de la UVA y en el resto de provincias, ha sido una auténtica sorpresa.
Al ver el examen muchos se replantearon las pocas probabilidades que teníamos ahora para sacar una buena nota en la prueba y, aunque ya lo veníamos pensando días atrás, hemos confirmado que, efectivamente, se está jugando con su futuro. Frustración y engaño es lo que se ha sentido tras ver las preguntas que, excepto una o dos, no se ajustaban a lo que se habló en las reuniones con el coordinador de la UVA , José Ramón Díez Espinosa, el cual hizo una serie de recomendaciones destacando el estudio de 18 estándares de aprendizaje.
Todo esto comenzó con la última reunión, convocada por el coordinador, con el fin de formalizar los exámenes y calmar los nervios de profesores y alumnos, que durante todo este curso nos hemos ido amoldando a los constantes cambios, y por ello todos nos fiamos de la palabra de José Ramón Díez Espinosa, el coordinador.
Después de todo esto, a unas semanas de la prueba, se hizo pública una noticia en la cual se notificaba el cambio completo del examen de historia, pasando de los 18 a 96 complejos estándares de aprendizaje. Ante esta noticia, se comenzó a pedir explicaciones a los profesores de historia que prácticamente sabían lo mismo que los estudiantes, nada, pero desde la Consejería de Educación se emitió un comunicado de que todo era una noticia falsa y que los exámenes seguían igual que como se acordó en la reunión, siguiendo con los estándares acordados, para tranquilizarnos de nuevo.
Sin duda todo esto, ha llevado a la única conclusión posible y previsible, UN DESASTRE.
Ante esta situación, FADAE, se puso en contacto con la Consejería de Educación, para buscar una solución, tras mantener una conversación sobre el tema, se señaló que para buscar una solución, las y los estudiantes afectados por esta cuestión, una vez publicadas las notas, deben presentar una reclamación sobre dicho examen, alegando los problemas que han surgido con anterioridad al mismo. Una vez se presenten un número grande de reclamaciones, como es de esperar, la Consejería de Educación, planteará en este caso una solución que aún no ha concretado.
Por todo ello FADAE y CONFAPACAL, solicitamos a la Consejería de Educación, que ofrezca lo antes posible una solución real a este problema, ya sea la anulación de dicho examen, o la repetición de este, siempre buscando la opción que más beneficie a los afectados por un problema que ellos no han causado, y por el cual deben pagar.
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